Ayer se realizó un nuevo remate de Rosgan en la Bolsa de Comercio de Rosario donde se ofertaron nada menos que 17.000 cabezas. En un contexto complicado por los efectos de la sequía el mercado logró consolidar precios razonables.
Si bien comenzaron las lluvias en muchas zonas de la parte central de Argentina, lo cierto es que los efectos de la sequía siguen marcando los negocios del agro y en este caso puntualmente de la ganadería. Esta semana se realizó el remate habitual de Rosgan en el recinto de la Bolsa de Comercio de Rosario con una oferta contundente de más de 17.000 animales en un contexto donde la zafra 2023 viene encontrando su final. Con este marco, la pregunta era cómo iba a responder el mercado ante una oferta abundante y los pastos secos más falta de alimento para quienes quieren llevar la hacienda a sus campos.
Lo cierto es que la respuesta de los compradores fue razonable y se lograron valores sostenidos en muchas categorías, aunque hubo otras más difíciles de colocar como por ejemplo la hacienda más liviana. En el caso del ternero el mercado convalidó un promedio de $481,82, un buen valor para esa categoría. El martillero y directivo de Pastore y Cía., Marcelo Armesto, explica que “la oferta sigue muy abultada, entendemos que eso responde a que la sequía sigue impactando fuerte en casi todas las zonas del país. A pesar de la oferta se encontraron buenos promedios sobre todo en el macho. Tal vez un poco más complicada estuvo la hembra sóla para la venta, notamos más selectividad en lo que es la ternera, sobre todo la ternera liviana y también el macho y hembra liviano. Esto responde también a que, al no haber pasto y no haberse podido hacer una reserva para el invierno, todo ese ternero muy liviano resulta costoso para entrar al feedlot por los precios altos del maíz. Entonces el destino de ese ternero muy liviano se tornó bastante complejo y ajustó por precio”.
Por su parte, el martillero de la firma Alzaga Unzué, Patricio Carli, explica que “hay compradores que, con la oferta abultada que hay no tienen demanda porque los feedlots están llenos y hay mucha gente que está retirada de la compra. Pero notamos que el ternero macho, sobre todo el más pesado, anduvo con una tónica mejor. Sin embargo, en el macho y hembra, que es una categoría que en Rosgan generalmente anda bien, esta vez se sintió la tranquilidad del mercado con cierta dificultad para colocarlos”.
En lo que respecta a la hembra ambos martilleros coinciden en la dificultad para su colocación. Carli agrega que “en el caso de esta categoría costó bastante colocarla” pero Armesto agrega que un párrafo aparte fue la vaca de invernada que logró sorprender por la demanda e hizo un promedio de $237,84. “En la vaca de invernada entendemos que ahí también se empezó a involucrar la industria y la verdad que nos quedamos sorprendidos porque entendíamos que iba a costar venderse”. El martillero de la firma rosarina concluye que “con este contexto creíamos que se iba a vender a precios muy inferiores a los que se obtuvieron. Se vendió, se trabajó, fue duro, difícil, pero con valores acordes a la época del año”.
Los precios promedio de cada categoría fueron: terneros $481,82, novillos $371,69, novillitos $428,98, terneros/as $446,60, novillos y vaquillonas $360,32, terneras $426,87, vaquillonas $372,81, vacas con garantía de preñez $124.281,41, vaquillonas con garantía de preñez $165.911,29, vacas con cría al pie $73.333,33, terneros holando $275,00, novillos holando $289,61, novillitos holando $272,47 y las vacas de invernada $237,84.